lunes, 14 de abril de 2008

Impresiones: Hohenschwangau


Este pequeño paraíso alpino en la cadena del Tirol, queda en Bavaria, y en la frontera con Austria. Si bien desde Freiburg im Breisgau (Baden-Württemberg) no hay camino directo y uno tiene entre unas 7 y 9 horas (con suerte) en tren (ya sea en los rápidos o en los regionales); la verdad es, que vale la pena.

El castillo de ensueño es el Neuschwanstein (el nuevo cisne de piedra, si todo eso en una palabra, los alemanes son así); y el amarillo pero no menos lindo es el Schwanstein (el cisne de piedra).

El Neuschwanstein construido por Ludwig II von Bayern (Luis II de Bavaria), muchos podrán decir de él, que estaba loco; yo creo que fué un valiente que se atrevió a soñar y a hacer realidad esos sueños; y este castillo fué su refugio, para escaparse de una realidad que no le agradaba. Lamentablemente la visita solo dura una hora, si o si con guía; y si el audio es en español, mas que parecer que habla Luis II de Bavaria, pareciera que hablara Fernando de Aragon y Castilla desde la tumba; pero esa hora...esa hora es un sueño. Si bien Luis II pudo pasar algunos días en él, no lo vio totalmente terminado, a la sala del trono, le falta lo más importante, el trono, que no se terminó nunca, dada la muerte de Luis II (ayudado a ahogarse en el lago Starnberg junto a su psiquiatra).

El Schwanstein, fue construido por el padre de Luis II, Maximilian II von Bayern sobre las ruinas del antiguo castillo de Hohenschwangau que supuestamente había sido levantado por Federico I Barbaroja. Si bien es un estilo distinto, y algo mas modesto, es igual hermoso; y tampoco se puede salvar uno de la guía.

El por qué del lugar del cisne, no es porque haya muchos cisnes (que particularmente no vi, salvo a patos), sino que se basa en la idea, de que son descendientes de Lohengrin, y por lo tanto de Perceval, los caballeros del Grial que llevaban un cisne blanco pintado en su armadura; y que fueron retratados en las respectivas operas de Richard Wagner.

En lo que a mi respecta, aún me debo volver a Bavaria (a pesar del viajecito en tren), para conocer los otros dos castillos de Luis II, el de Linderhof y el palacio de Herrenchiemsee, que prometen ser igual de hermosos.

Para saber más, sugiero:

http://es.wikipedia.org/wiki/Luis_II_de_Baviera

http://de.wikipedia.org/wiki/Neuschwanstein (lo sé, esta en alemán, pero puede leerse en español)

http://de.wikipedia.org/wiki/Schloss_Hohenschwangau (este también está en alemán, pero puede leerse en inglés)

http://www.neuschwanstein.de/

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, Fer, mil gracias por tu comentario, de alguna manera, era lo que necesitaba leer...
Me dejaste pensando y la verdad que muy asombrada, cre que tanto vos como yo, somos guerreras de la luz..
Y vaya a saber cuánta gente más, que aún no se ha dado cuenta...
Besos

Anónimo dijo...

Hola Fernanda
Este tipo de comunicaciòn la veo fantàstica, uno ve lugares, como en este caso, contado por la persona que conoce, que transita esos caminos, que se ven muy hermosos!

Que estès bien!

Anónimo dijo...

La verdad, que son hermosas las imágenes, como interesante el relato que haces de cada sitio...!!!BELLÍSIMO!!!